Que mas da que sea alto o bajo, delgado o gordito, que sea rubio o moreno, que tenga los ojos azules o marrones, que le guste los libros más que el alcohol, que prefiera una película con su novia antes que un partido de fútbol con los amigos, que sea del atléti o no, que vaya a un colegio de "pijos" o que no, que mas da si vive en la Sierrilla en una casa de lujo o no, que sus padres tengan un renault en lugar de un mercedes, que vista de marca o del mercado, que mas si veranea en su chalet de Marbella o en su pueblo, si es popular o no, que mas da si es tan guapo como Mario Casas o no... A mí todas estas cosas me dan exactamente igual.
A mí lo que realmente me importa, es que seamos felices juntos; que se levante sonriendo con un motivo: es la persona más feliz por tenerme a su lado, y que yo sea también la persona más feliz por tenerle a él; que si me choco con la pared o me tropiece con el suelo, él sea el primero en levantarme y en sanar mis heridas; que me de su cariño insustituible; que me bese; que me abrace; que me susurre te quiero al oido; que nos pasemos las horas muertas mirándonos sin decir nada, porque ese nada, lo significa todo; que con una sonrisa tenga la capacidad de cambiar el mundo; que me quiera; que le quiera; que nos queramos los dos.
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